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Orientaciones 2016 OEA

3.III.3.3. Transportistas ferroviarios

En general, la auditoría de un transportista ferroviario no difiere significativamente de las de otros transportistas. Puede considerarse incluso que los operadores ferroviarios presentan un riesgo menor a causa de la naturaleza del modo de transporte. En cualquier caso, la planificación de las actividades de auditoría y la evaluación de los riesgos serán objeto de reflexión sobre algunos aspectos diferenciados de las operaciones empresariales de los transportistas ferroviarios:

  • Los operadores ferroviarios se someten a lo dispuesto en acuerdos y convenios internacionales (COTIF, CIM). Estos acuerdos pueden imponer requisitos relativos a los precintos y la integridad de la carga. También pueden abordar las responsabilidades durante el transporte.
  • El tráfico ferroviario se atiene a los reglamentos y certificaciones en materia de seguridad ferroviaria relativos a la protección tanto de los pasajeros como de la carga. Estos reglamentos y certificaciones pueden incluir requisitos referentes a los sistemas de gestión de la seguridad, a la protección del personal y a los sistemas de control interno.
  • Los transportistas ferroviarios operan en un entorno fragmentado desde el punto de vista normativo. Las operaciones ferroviarias pueden estar reguladas y supervisadas por varias autoridades nacionales.
  • El entorno operativo contiene varios elementos que a menudo están sujetos al control de terceros encargados de elementos de la infraestructura, como las vías, las estaciones de clasificación y los terminales de contenedores, o de terceros responsables de la unidad de carga.
  • El solicitante podría tener una estructura organizativa complicada, numerosas instalaciones y una amplia gama de operaciones. Las operaciones se pueden dividir también en operaciones con pasajeros y operaciones con carga.
  • Los transportistas ferroviarios pueden operar con multitud de socios comerciales, por lo general sobradamente conocidos. Puede tratarse, por ejemplo, de transportistas por carretera, almacenistas, operadores portuarios y proveedores de servicios de seguridad en las estaciones. La carga y la descarga de unidades de carga o contenedores en vagones pueden ser responsabilidad del transportista. Sin embargo, tales operaciones de carga y descarga suelen ser responsabilidad del cliente. Normalmente, los transportistas ferroviarios no cargan ni descargan tales unidades por sí mismos ni por mediación de terceros. Solo si los transportistas ferroviarios ofrecen por sí mismos servicios de paquetería y otros adicionales de índole logística podrán asumir la responsabilidad operativa relativa a la manipulación de las mercancías.
  • Durante el transporte varias personas pueden ocuparse de la gestión de los documentos o del control de las unidades de carga y los vagones. Los transportistas ferroviarios únicamente se ocupan de la gestión de las mercancías en los puntos de transferencia de la carga, los centros logísticos y los almacenes cuando ofrecen a título propio servicios de paquetería y otros adicionales de carácter logístico.

Cuestiones de interés durante la evaluación de riesgos y la auditoría de un transportista ferroviario que solicite el estatuto de AEO:

  • Para comprender mejor el entorno empresarial, las autoridades aduaneras deberán pedir al solicitante que antes de la auditoría realice una breve presentación de la normativa, los acuerdos y los convenios a los que está sujeto.
  • Al preparar la auditoría, los auditores deberán tener la oportunidad de establecer una visión global e inequívoca de los centros e instalaciones que intervienen en las operaciones aduaneras y de determinar si el solicitante ejerce control o no sobre los mismos. Tales centros son los locales en los que se gestionan los documentos relacionados con la actividad aduanera, las unidades de carga y las mercancías.
  • Prevenir el acceso no autorizado a las mercancías y las unidades de carga conlleva la utilización de métodos de vigilancia de la seguridad adecuados, sobre todo en las estaciones ferroviarias de acceso abierto, en las tareas de transporte, descarga y carga y en las paradas.
  • Se ha de llevar un seguimiento de las unidades de carga, los procedimientos de seguridad relacionados con el cruce de fronteras (cámaras de vigilancia, escaneo) y detenciones, el pesado de la carga y la inspección de siete puntos (sobre todo después de un período de almacenaje prolongado).
  • Es necesario establecer procedimientos de precintado, incluidas las instrucciones que se han de seguir en caso de violación de la seguridad.
  • Se han de identificar los socios comerciales y se han de incorporar los requisitos de seguridad a los contratos, incluso en el caso de los socios eventuales. Debido a la externalización de las actividades principales (carga, descarga, vigilancia de seguridad), el solicitante ha de gestionar los riesgos relacionados con los socios comerciales mediante la incorporación de determinados requisitos a los contratos y la vigilancia de su cumplimiento. Asimismo, las rutinas aplicables en caso de detección de violaciones de la seguridad desempeñan un papel importante en el refuerzo de la seguridad de la cadena de suministro.
  • La formación para la sensibilización en materia de seguridad se ha de impartir de forma adecuada.
  • Las rutinas relativas a la comunicación y la gestión de las violaciones de la seguridad constituyen un requisito fundamental.