5. Los Impuestos Especiales
Los ingresos por Impuestos Especiales aumentaron un 2,6%, sumando un total de 20.757 millones de euros. El crecimiento se produjo gracias al Impuesto sobre Envases de Plásticos No Reutilizables, nuevo en 2023. Eliminando los ingresos por este impuesto (591 millones), la recaudación total por Impuestos Especiales en 2023 sería un poco más baja que en 2022 (-58 millones) (Cuadro 5.1). Por figuras, los ingresos por el Impuesto sobre Hidrocarburos se incrementaron un 0,6%, resultado del mayor consumo de gasolinas que compensó el mal comportamiento del resto de productos. En el caso del Impuesto sobre Labores del Tabaco, los ingresos aumentaron un 0,5% debido al significativo aumento de los precios, tanto de los cigarrillos como del resto de labores, que permitió suplir la caída del consumo en ambas categorías. El Impuesto sobre la Electricidad registró un fuerte descenso de los ingresos (-18%) explicado por la disminución de precios y consumo, aunque su peso siguió siendo marginal en 2023 a causa de la prórroga durante todo el año del tipo del 0,5%, en vigor desde mediados de septiembre de 2021. En el caso de los impuestos sobre el alcohol, se redujeron los ingresos del Impuesto sobre el Alcohol y Bebidas Derivadas (-9,8%) y del Impuesto sobre los Productos Intermedios (-11,3%), mientras que los ingresos del Impuesto sobre la Cerveza se mantuvieron estables.
El valor de los consumos sujetos a Impuestos Especiales disminuyó un 13,9%, tras el fuerte incremento registrado un año antes (41,7%). La caída del valor de los consumos en los componentes que más peso tienen en el agregado (gasolinas, gasóleos y electricidad) explica este resultado, que, a su vez, se deriva de la fuerte reducción de sus precios desde los elevados niveles alcanzados en 2022. A este factor, se suma el descenso generalizado en los consumos sujetos.
En efecto, en 2023 disminuyeron los consumos de todos los productos sujetos a Impuestos Especiales (Cuadro 5.1), con la excepción de las gasolinas. Destacan las caídas de los consumos de alcohol puro (-5,1%) y cigarrillos (-4,1%), en ambos casos en un contexto de subidas de precios. Los consumos de electricidad y de combustibles también se redujeron, un 3,3% y 1,2% respectivamente. En cambio, el consumo de cerveza se mantuvo estable.
En lo que se refiere a los precios, en los energéticos, el precio medio de gasolinas y gasóleos se redujo un 12,5% (un 17,1% antes de impuestos; Cuadro 9.1), en paralelo con la evolución del precio del barril de petróleo en euros, que disminuyó un 21,4%. En la electricidad la caída del precio de venta al público fue del 19,7% (-18,4% antes de impuestos, Cuadro 5.7). Hay que recordar, no obstante, que, tanto en un caso como en el otro, se partía de máximos históricos y que, a pesar de estos descensos, los precios siguieron en niveles muy superiores a los anteriores a 2022.
En el resto de precios, los de las bebidas alcohólicas se incrementaron un 4,8% (7% antes de impuestos, Cuadro 5.2) y los de la cerveza un 12,3% (13% antes de impuestos, Cuadro 5.3). En las labores del tabaco, el precio medio de venta al público aumentó un 6% (10,6% antes de impuestos, Cuadro 9.2), registrando incrementos en los precios medios tanto de las cajetillas (5,9% el precio medio de venta al público y 12,1% antes de impuestos) como del resto de labores (8,8% el precio medio de venta al público y 13,2% antes de impuestos).
En cuanto a los tipos efectivos (Cuadro 5.1), en 2023 no hubo ningún cambio en los tipos legales (la rebaja del tipo en el Impuesto sobre la Electricidad, del 5,11% al 0,5%, ya estaba vigente en 2022), de manera que los únicos cambios que se observaron fueron los derivados de las variaciones en los precios (cuando el impuesto gira sobre el valor) o de la composición de los consumos (si la base del impuesto son los consumos físicos). En el primer grupo están tanto el tipo efectivo de la cajetilla de tabaco (con un incremento del 4,6%) como el de la electricidad (-17,4%). En el segundo destaca el aumento del tipo efectivo de gasolinas y gasóleos consecuencia del crecimiento de las gasolinas, gravadas un tipo más alto, y la caída de los gasóleos.
Los Impuestos Especiales devengados crecieron un 3% (Cuadro 5.1). Este aumento se explica por la entrada en vigor en 2023 del Impuesto Especial sobre Envases de Plástico No Reutilizables. Sin tener en cuenta estos ingresos, se hubiese registrado una caída de los impuestos devengados del 0,3%. Los impuestos sobre Hidrocarburos, Labores del Tabaco y Cerveza se mantuvieron en niveles prácticamente idénticos a los de 2022; el resto experimentó descensos significativos, en especial el Impuesto sobre la Electricidad.
El Impuesto sobre Hidrocarburos apenas aumentó un 0,1% (Cuadro 5.5), con grandes diferencias por productos. El impuesto devengado por las gasolinas creció un 5,9%. Los otros productos registraron una caída, que en algunos casos fue muy significativa, como en el gasóleo a tipo reducido (-10%) y el gas natural no utilizado como carburante (-11,9%). El leve incremento de la recaudación devengada se produce a pesar de la caída del conjunto de los consumos (-1,2%) gracias a la subida del tipo efectivo derivada de un mayor uso de productos gravados a tipos superiores.
El Impuesto sobre Labores del Tabaco devengado creció un 0,7% (Cuadro 5.6). El incremento fue mayor en las otras labores (4,1%), que en los cigarrillos (0,3%). Este aumento del impuesto devengado se produjo a pesar de la caída del consumo (-3,2% el total, -4,1% las cajetillas y -0,8% las otras labores) e impulsado, por tanto, por el aumento del precio medio antes de impuestos (10,6% el total, 12,1% las cajetillas y 13,2% el resto de productos).
El Impuesto devengado sobre la Electricidad se redujo un 20,1% (Cuadro 5.7) por la tendencia decreciente del consumo de electricidad (-3,3%) y, sobre todo, por la considerable reducción de precios (-18,4% antes de impuestos), en un contexto en el que se prorrogó durante todo el ejercicio 2023 la reducción del tipo.
El Impuesto sobre el Alcohol y Bebidas Derivadas retrocedió un 5,1% en 2023 (Cuadro 5.2), en línea con la caída de los consumos, que pudieron verse afectados por el aumento del precio antes de impuestos (7%). Por su parte el Impuesto sobre la Cerveza se mantuvo en niveles casi iguales a los de 2022 (Cuadro 5.3).
El Impuesto sobre el Carbón retomó su tendencia decreciente, con una caída del 36,6% hasta los 33 millones, manteniendo un papel residual dentro del sistema.
El Impuesto Especial sobre los Envases de Plástico No Reutilizables, que entró en vigor en 2023, aportó 663 millones.
La recaudación por Impuestos Especiales alcanzó los 20.757 millones, siendo un 2,6% superior a las cifras de 2022. Su crecimiento fue inferior al del impuesto devengado, entre otros elementos, porque la caja de 2023 solo recogió 11 meses del devengo del Impuesto Especial sobre los Envases de Plástico No Reutilizables cuyas primeras declaraciones se ingresaron en febrero. Sin este impuesto, la recaudación habría caído un 0,3%.